lunes, 28 de julio de 2008

Polémicas de fin de semana

Un fin de semana intenso. Unos días con amigos y con grandes “discusiones”. Intercambiar opiniones con amigos sobre temas polémicos aunque suba el tono de la conversación es algo que se debería hacer más a menudo.

Una de esas discusiones empezó hablando de lo irresponsables que somos muchas veces consumiendo medicamentos. Es cierto que en numerosas ocasiones tomamos antibióticos, ibuprofenos y demás al menor síntoma, sin que un profesional cualificado nos lo haya indicado.
Hasta ahí, todos de acuerdo.

La conversación fue avanzando, y tocamos el tema de las píldoras, parches y demás sistemas anticonceptivos. La opinión generalizada fue que una gran mayoría de las personas que las toma, no está correctamente informada de los numerosos efectos secundarios que tiene tomar este tipo de medicación, sobretodo si se hace durante un período prolongado de tiempo.
Pero la gran polémica estalló cuando comentamos sobre la “píldora del día después”.

No voy a explicar detenidamente qué seguimos comentando después ni las diferentes posturas, algunas bastante extremas he de decir, que había en la conversación.
Pero al hilo de todo esto, se me planteó una cuestión.

Está claro que cualquiera de las posturas que podamos tomar en estos temas, es muy respetable, podamos estar de acuerdo con ellas o no.
Cada uno es muy libre de pensar que es un escándalo que personas de 15 años vayan a pedir a una farmacia esta píldora, o por el contrario que les parezca de lo más razonable que lo hagan.

Lo que no me queda demasiado claro es la postura de la farmacia. A mi modo de ver la farmacia es un servicio público. Su función y su situación están reguladas de alguna manera por el Estado.
No puede haber más de una farmacia en tantos metros cuadrados / habitante, dispensa medicación subvencionada por la Seguridad Social, etc etc.
Es decir, no es una tienda a la que entras a comprarte un jersey porque ese concretamente te ha gustado. Vas allí porque es en el único lugar en el que puedes obtener un medicamento que además te ha recetado el médico.
Ahí entra el papel del farmacéutico.
Me parece perfecto que el farmacéutico no esté dispuesto a vender un medicamento sin la correspondiente receta del médico. De hecho, lo que no debería pasar es lo contrario.

Pero y en el caso contrario? En el caso de que una persona vaya con la receta de un medicamento (la “píldora del día después” por poner un ejemplo claro), cuyo consumo no entre dentro de los cánones de moralidad y ética del farmacéutico?
No debería suministrárselo de todas formas ya que es un servicio público??
Igual que no se venden medicamentos sin receta, deberían venderse sin rechistar medicamentos que sí que la tienen aunque al farmacéutico de turno no le guste la idea?

Personalmente lo tengo clarísimo.
ACLARACIÓN:
Este post no quiere ser ningún ataque a NINGÚN profesional de la farmacia, que se merecen todo mi respeto y gratitud.
Tampoco quisiera que contertulios de conversaciones pasadas se sintieran molestos por ello. Si es así, mis humildes disculpas.

18 comentarios:

Holly Golightly dijo...

Cuando se tienen dudas, lo mejor es informarse.

El siguiente párrafo está extraído del " Código de ética farmacéutica"

Artículo 20: La responsabilidad y libertad personal del farmacéutico le faculta para ejercer su
derecho a la objeción de conciencia. En todo caso, deberá asegurar que ningún paciente
quede privado de asistencia farmacéutica a causa de sus convicciones personales o
creencias religiosas.

Unknown dijo...

La realidad es que el farmacéutico en España siempre ha estado bien valorado y de hecho recibe una formación con gran prestigio a nivel internacional.
Sin embargo considero que, como en otros ámbitos de la vida la especialización equivale a productividad y efectividad. Y lo digo porque la función del médico es sanar, su especialidad es la enfermedad, el diagnóstico; y la función del farmacéutico es la del galeno (maestro del medicamento) y por eso mi opinión difiere un poco.
¿¿Sabe más el médico del fármaco que el propio farmacéutico?? Al igual que el farmacéutico tiene nociones básicas de la enfermedad, el médico tiene nociones básicas del medicamento. Pero no por ello el farmacéutico diagnostica y en mi opinión el médico no debería de recetar tanto. ¿¿No puede ser que un farmacéutico detecte una mala prescripción?? No sólo pasa, sino que ocurre con cierta frecuencia. Y de esto sé un buen rato.
Por lo tanto, lejos de moralidades religiosas y éticas del farmacéutic y muy cerca de la profesionalidad del mismo a veces se dispensan medicamentos por cabezonería del paciente. Entiendo al farmacéutico radical en la defensa de su voto en la defensa del cuidado de la salúd de SU paciente.

Holly Golightly dijo...

A petición de lectores anónimos:

http://www.who.int/reproductive-health/family_planning/es/ec.html

Es un enlace a la Organización Mundial de la Salud

Holly Golightly dijo...

El farmacéutico como bien dices es profesional del medicamento. Y como tal debe ser tajante y estricto en cuanto al su suministro al paciente. Ciertamente, si piensa que la administración de ciertos fármacos va a suponer un perjuicio en la salud de su paciente, actuará en consecuencia sin ninguna duda, o al menos debería hacerlo.
Eso sí, siempre y cuando resulte dañino para la salud.

La reflexión que planteo es si en muchas ocasiones, y con fármacos “ polémicos” se actúa de forma estricta desde el punto de vista farmacéutico, o si nos dejamos llevar por nuestras convicciones personales, negándoles de alguna manera el tratamiento a los pacientes que nos lo solicitan.
Si la farmacia estuviera liberalizada como en otros países, no plantearía la duda. Pero siendo un servicio público como es en España no tengo tan claro hasta dónde llega la responsabilidad y la obligación profesionales del farmacéutico, y en dónde se encuentra la frontera con la moralidad y ética de la persona, si es que la hubiera.

Anónimo dijo...

¡¡Qué va!!
Lo que pasa es que hablo con vehemencia...
Pero el blog tiene que crear discusión...
Vaaaleee, también soy farmacéutica. jejeje
De todas formas creo que la liberalización de la farmacia (con la que no estoy en desacuerdo) no crearia un grupo de farmaceuticos más orientados a la correcta dispensación.
También opino que si hablamos de una ética moral, yo también porque entenderé que no se puede separar de la ética profesional.
Mañana seguimos que esto se pone interesante.

Ramón de Mielina dijo...

Hombre, yo sí he visto si no un ataque hacia el farmaceútico, sí un cuestionarse su papel. Un farmaceútico no es un mero vendedor de medicamentos, de ahí "consulte a su farmaceútico...". Estos tienen un gran papel a la hora de evitar la automedicación, por ejemplo, y es de agradecer que haya quienes primen su conciencia o su buen hacer profesional a vender por encima de cualquier cosa y en cualquier circunstancia.

No estoy de acuerdo en que, si la receta es adecuada y en un momento necesario (véase la píldora del día después o las píldoras anticonceptivas) no las dé ni con receta. Obviamente, en conciencia, y si va en contra de su moral/ética, sí que se verá en la obligación de informar adecuadamente ya que es verdad que los clientes muchas veces ignoran la realidad de los efectos de algunos medicamentos que toman alegramente.

No obstante, puedo llegar a entender que algún farmaceútico, ya que no se trata de vender jerseys, se niegue a hacerlo. Ahora bien, sí, es un servicio público y, en mi opinión, esto le podría acarrear ciertos problemas. Si compensa, adelante. Que no... pues a comerse la conciencia con patatas.

Es como todo, cuestión de principios, prioridades, etc.

Ramón de Mielina dijo...

¡Ah! Y otra cosa. No creo que tengas que disculparte. Tú sabías las reacciones que ibas a causar escribiendo este post... :-)

Me parece que las disculpas sobran o van tarde, según cómo se vea.

;-)

Holly Golightly dijo...

Si consideráis el post como un ataque a los farmacéuticos en general, pues me he debido expresar fatal, porque no era esa mi intención. De ahí las disculpas, que dicho sea de paso, cuando uno se ha equivocado o se ha malinterpretado su forma de proceder, nunca están demás y desde luego mejor tarde que nunca.
:-)

Como profesionales ampliamente formados que son, se reconoce como importante su labor para con las personas, y es por ello que tienen una gran responsabilidad.
Al igual que los médicos, los farmacéuticos conviven día a día con la salud de los pacientes, y por eso mismo no es algo que se deba tomar a la ligera, y mucho menos compararlo con vender un jersey (honrada actividad profesional, sin duda).

Una de las cosas que diferencia a las farmacias de los consultorios médicos es que su establecimiento está limitado por ley. Es decir, yo no puedo poner una farmacia donde me de la gana. En cambio, perfectamente puede haber todo un edificio lleno de consultas de médicos de la misma especialidad.
Ahí es donde quiero hacer la reflexión. Si yo farmacéutico, tengo las ventajas de ser un servicio público “exclusivo”, no tendré que cumplir con las obligaciones que comporta esa “exclusividad”? Sobretodo, cuando la administración de ese fármaco ha pasado además por otro filtro como es el del médico.

Entiendo y comparto la opinión de los que habéis comentado que el farmacéutico tiene una labor importante detectando malas prescripciones. Pero seamos sinceros, no estamos hablando de eso. Estamos hablando de ciertos fármacos que por moral, ética, religión, u otras causas diferentes de la estricta aplicación farmacológica o médica, no se suministran, alegando con frecuencia excusas más o menos creíbles para no dar una negativa clara.
El uso de esos medicamentos, es una opción claramente personal que cada uno ha de consultar con el médico. Una vez obtenida esa autorización y siempre teniendo claro que el paciente conoce todos los efectos, y que no se está cometiendo un abuso del medicamento en cuestión, el farmacéutico no tendría porqué negarlo.

Anónimo dijo...

putos farmaceuticos. se forran a nuestra costa

Anónimo dijo...

Seguramente que muchos os/nos hemos horrorizado cuando nos enteramos de que unos padres (por su condiciones morales) no quieren que le hagan un transplante de sangre a su hijo enfermo. Es inaceptable!!!, se oirá por ahí. Pues la lógica inherente a este razonamiento y al del post es la misma aunque las premisas de inicio sean diferentes.
A mi, sinceramente, si que me parece inaceptable que una concesión pública no me venda medicamentos con prescripción médica. Primero porque las farmacias son meros comercios, es decir, para mí el farmacéutico de las farmacias es como el que te vende el periódico y seguro que nos parecería fatal que el quiosquero no nos venda el periódico porque el contenido del mismo no se adecua a su moralidad. ¡RIDICULO!. EL otro día hablaban del tema en la tele y tuve que escuchar a una farmacéutica (de esas que han estudiado una carrera dificil y de gran prestigio) que el uso de los condones provocaban más embarazos no deseados y el contagio de enfermedades de transmisión sexual. Su lógica se basaba en que el ´preservativo no es fiable al 100% y cuanto más veces se use, más falla y por lo tanto más te puedes contagiar. Me quedé sin palabras. Claro es mucho mejor el "libre albedrío", para que utilizar preservativo, si yo lo que quiero es tener SIDA y Gonorrea y cualquier cosa que se me ocurra.
Las farmacias deben prestar un servicio público, y el vender tanto preservativos para evitar enfermedades o embarazos (no todo el mundo quiere hijos desde el minuto 0), eso debe quedar en la conciencia del usuario, no del dispensador, y más cuando tiene receta. Podría seguir con el tema, pero va a ser interminable.

Anónimo dijo...

Hay un concepto equivocado.
Si bien es cierto que la autorización de la apertura de una farmacia no es libre, el capital es 100% privado. Por lo tanto no es cierto que sea un establecimiento de la seguridad social. Por lo tanto, guste o no, cada uno en su casa guisa y come lo que le da la gana.
Aunque yo no me estaba metiendo en temas de moral, entiendo que cada uno tiene la suya, pero si nos ponemos en ese plano seguire el camino.
¿Porque una persona individual no puede elegir ejercer su profesión de la forma que crea conveniente? ¿No puede un quiosquero decidir que chicles quiere comprar o que estilo de revistas vender?
Guste o no guste, el uso de preservativos no asegura al 100% la acción anticopcetiva y de hecho siempre que se vayan a tener relaciones sexuales con riesgo en un posible embarazo se pide que se tomen dos vías anticonceptivas. ¿No puede un farmacéutico, que ha leido artículos científicos elegir la opción de que no cree en la totalidad del preservativo como anticonceptivo? Puedes estar de acuerdo o no, busca datos que avalen el argumento. Seguramente esté pensando en gente que no tiene ni idea de como se utiliza (sorpendería saber la cantidad de gente que no lo utiliza correctamente: momento exacto de su colocación, preservativos en mal estado...) Hay varios estudios que hablan de un uso incorrecto del condón.
De todas formas es una pena pensar que vemos las profesiones de servicio como quien sólo sabe hacer la O con un canuto: "para mí el farmacéutico de las farmacias es como el que te vende el periódico" Desprestigiando dos profesiones dignas en solamente 15 palabras.
Es una pena, que un foro de opinión haya que recurrir al insulto para defender ideas que por las formas han perdido su argumento: "putos farmaceuticos. se forran a nuestra costa".

Anónimo dijo...

Que conste que aquí cada uno entiende lo que quiere. Pero para mi un farmaceutico de farmacia es un mero comerciante, no así los farmaceuticos de laboratorio, que investigan y hacen experimentos y otro tipo de temas. La farmacia es una tienda, como cualquier otra, sin desprestigiar nada, ni al quiosquero ni a la panadería. Quien no lo quiera ver así, no lo verá, por supuesto. Sino fijaros en las farmacias del extranjero, que venden hasta cuadernos, lápices y cualquier cosa, y para el tema de la química piden receta y listo.

Ramón de Mielina dijo...

Los anónimos deberían ponerse un nick...

Rayo Verde, algunos farmaceúticos hacen fórmulas en sus farmacias. No creo que sean simples comerciantes, voy a romper una lanza en su favor. Son especialistas en lo que venden, son unos cuantos años de carrera y tanto medicina como farmacia son dos carreras en las que la ética y la moral juegan un papel determinante. De ahí la polémica.

Anónimo dijo...

Es desconocimiento de la profesión, ya que el panadero no se limita a vender pan... Hay muchisimos parámetros que influyen en la calidad del pan: temperatura del agua con la que se realiza la masa, humedad relativa en su transporte y almacenamiento... y varios factores más que desconozco a pesar de que por mi trabajo tengo trato con algunos obradores.
Si nos dejamos llevar por las apariencias, todo es muy simple. Sin embargo en paises como Inglaterra, el farmacéutico tiene un papel destacado en las farmacias. De hecho incluso en varias ocasiones "receta", ya que el médico unicamente entrega al paciente el historial del diagnóstico, pasa "consulta" (conocido como atención farmacéutica) y es el único capaz de dispensar ciertos medicamentos que deben estar sometidos a un mayor control.
Cuenta en la farmacia con un equipo humano al que debe coordinar y formar para que sean capaces de diferenciar la acción de un ibuprofeno y paracetamol; para que puedan asesorar al que requiera una FP.
Quiero decir con esto, que a pesar de ser farmacéutico de laboratorio, quien quiera conocer el mundo de la farmacia de cerca, que se ponga en contacto conmigo que le dejo todo un sábado al frente de una (supervisado por mi misma, sigo colegiada) y después comentamos la jugada de si realmente para ser farmacéutico no hay que ser mayor de edad.
Puede ayudar a encontrar otro prisma desde el cual juzgar la labor del profesional del medicamento.
El comentario anterior al segundo de Rayo verde era mio también. Como veis soy una apasionada de mi gremio, aunque entiendo que no todos compartis mi visión del trabajo farmacéutico, os deseo que esteis tan orgullosos como yo de vuestros respectivos sectores.
Enhorabuena holly, porque como ves has acertado con el tema a debatir. ¡¡Ha sido el despegue del blog!!
Bss a todos.
Victoria

Anónimo dijo...

un blog no es para chupar pollas victoria. no elige bien los temas y no escribe bien. no le digas que si

Anónimo dijo...

aburris todos

Anónimo dijo...

Pues que pena que estés tan aburrido, Anónimo! A ver si un día nos deleitas con tu escritura. Pero eso si, refinate un poco antes!

Ramón de Mielina dijo...

Pero vamos a verrrr... ANÓNIMO DA LA CARA!!!